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La Novena de Mahler . Andante comodo ( Primer movimiento ) Presentimientos de muerte


 
Mas su joven corazón no puede más; en sus venas la sangre se detiene y se hiela y el ánimo perdido con la fe se abraza sintiéndose caer al beso de la muerte.

Predisposición, amor y tiempo para beber hasta la última gota del cáliz de esta media hora de música.

Excepcional movimiento sinfónico del autor. Su forma: un misterio pues no encaja en ningún género determinado; se apoya en apariencia, sobre varios esquemas tradicionales. 
La forma sonata parece planear por ese rumbo al naufragio. La última estructura sonata escrita por Mahler…. Dobles variaciones, forma del lied…. Se ha dicho de todo.

Sea cual sea la forma, asombra como llega Mahler a levantar una organización desde el caos, a combinar lo amorfo y lo dinámico, el silencio y el grito, la vida y la muerte. Un movimiento que es un verdadero mundo en sí mismo, él más moderno de su autor

En esencia viene a ser una larga y combativa marcha o cortejo fúnebre pero sin relación con las que escuchamos en la Segunda o Quinta Sinfonías. Su escritura es revolucionaria; todo el lenguaje mahleriano está presente en este movimiento de sueño y horror: todo cuanto se ha encontrado aisladamente en sus obras anteriores, aquí aparece resumido: lied y sinfonía, orquesta de las sinfonías del periodo medio y orquesta de la Canción de la Tierra.

Su cualidad narrativa se expresa en dos temas no cantabiles, discontinuos y difíciles de retener que a modo de personajes en lucha discurren por el Andante … Uno, el tema principal “de la Esperanza de vida”, otro lo combate : el contratema “de la Angustia”. En torno a ambos, una serie de motivos, secundan la acción (motivos pretemáticos, primordiales o supratemáticos) a veces pesantes, otras ligeros y etéreos, y otras apocalípticos; motivos que provocan una suerte de rumor, una característica bruma sonora que la que nunca se desprende el tema principal. Temas y motivos.

Los temas 

El tema de la Esperanza, expresa un anhelo de vida y ternura. Quizás el único verdadero tema musical, hilvanado y desarrollado en este Andante comodo y en toda la producción mahleriana. Un tema que debería sonar entrañable y afectuoso; pero escuchamos el trasfondo de motivos incompletos, desiguales e irregulares que lo transforman en desapacible. Como si la melodía del tema fuera una evocación o un recuerdo y lo auténticamente real fuera un entramado irregular de motivos que nos llevan a un terreno inseguro.

El tema de la Angustia, entra tras el terrible golpe de timbal: expresa agitación, y presagio de muerte y que actúa como contratema. A toda costa, intentará a lo largo del movimiento hasta conseguirlo, destrozar y trocear la esperanza.


Temas



Los motivos

En el comienzo del Andante, cuatro breves motivos, singulares células musicales que constituyen los cimientos de la pieza : una llamada en pianissimo de los violoncellos y las trompas, cuatro  notas del arpa que tocan el motivo de la “Canción de la Tierra”,  separadas por un silencio, un motivo lejano de la trompa y el ritmo ondulante marcado por las violas. Breve introducción que evoca la respiración angustiada y los latidos irregulares del enfermo corazón (ritmo sincopado ) de Mahler. ( Enrique Rueda )

Hay otro motivo que Adorno llama ,“crítico”, pues lo que le sigue, puede ser la victoria o la catástrofe. Evoca el motivo de la Primera Sinfonía, "Titán" y podría evocar la añorada juventud de Mahler.

Y finalmente el motivo de las fanfarrias o de las “llamadas heroicas”, señalado por la mahleriana Vera Micznik.  Enrique Rueda recuerda como Mahler de niño, vivía junto a un cuartel militar. Las fanfarrias y marchas son una hermosa e idealizada evocación de aquella época. El niño adolescente Gustav ve morir en aquella época a gran parte de sus ocho hermanos, también niños. Por otra parte, estas “llamadas”  en Mahler casi nunca suenan épicas al contrario que en Liszt o Wagner. En Mahler anhelan el consuelo y la ayuda , a veces suenan terribles y apocalípticas presagiando la tragedia, e incluso a veces suenan fuera de contexto.


Motivos 


Fanfarrias, niñez, cortejo fúnebre, la muerte misma, todo convive y camina en el espíritu de aquel niño y de este adulto. Brotan no sólo en la Novena, también en otras de sus sinfonías. Los fantasmas infantiles afloran y los introduce de forma autobiográfica en su música.


... Así se expresaba Alban Berg en unas lineas que dirige a Alma Mahler después de escuchar el movimiento : 
  

“Todo el primer movimiento descansa sobre el presentimiento de la muerte. La muerte se anuncia sin cesar una y otra vez; el intenso deseo de vivir alcanza el paroxismo, pero la muerte se impone con la máxima violencia. Sobre todo en el pasaje terrorífico en el que este presentimiento se convierte en certidumbre: en plena alegría de vivir, casi dolorosa alegría además, la muerte en persona se anuncia con todas sus fuerzas desplegadas.” 
Sigue escribiendo Alban Berg: “es la expresión de un amor inaudito a esta tierra, el deseo de vivir en ella en paz y de gozar de la naturaleza hasta el límite y en toda su profundidad, antes de que llegue la muerte que se aproxima irremediablemente.”

Andante comodo 0:00 - 30:00
Leonard Bernstein & Royal Concertgebouw Orchestra




Inmensa sonata con su exposición, desarrollo, reexposición y coda

Seguido del breve motivo de la Canción de la Tierra, comienza la Exposición de esta colosal sonata, con el tema principal, el tema de la esperanza, entrañable pero con ese trasfondo de inseguridad.

Pronto cambiará la música a re menor, se ensombrece el tema principal, golpea el timbal y entra, violento, el tema de la angustia expresionista, agitado, terriblemente inquieto, que va creciendo en tensión hasta culminar en el motivo crítico y en el las llamadas heroicas (en las trompetas) que dará paso a la segunda exposición del tema principal, anhelante de vida. 
Volverá insidioso el tema de la angustia acompañado del motivo de las llamadas heroicas y a partir de aquí crece la agitación y una lucha titánica entre diferentes motivos. Retumban los timbales, el sonido de las fanfarrias pone fin a la exposición y nos encaminamos  al desarrollo del movimiento.

El desarrollo 7:19 lo marcará el timbal golpeando con pasos irregulares el motivo inicial de la Canción de la Tierra y aparece amenazador el motivo de las llamadas heroicas con las trompas en sordina. 
El desarrollo se va produciendo entre disoluciones, rumores y bruma, en un clima de sombría inquietud e indefinición. Muy poco a poco, y de un estado de indefinición turbadora quiere resurgir y resurge a duras penas el tema de la esperanza, esta vez superpuesto al entorno de la constante y sutil marcha fúnebre que está en el trasfondo. Después de unos momentos casi idílicos, se sucederán con precipitación los motivos: las fanfarrias, resuenan los timbales, terribles los metales, y el motivo crítico, de la catástrofe 12:19.
Todo se ha estado precipitando hacia el abismo entre 11:08 y 12:40;  El tema principal destruido. Una situación de caos y de total desintegración se apodera de la música durante unos momentos, hasta que de nuevo, implacable entra en el tema de la Angustia: arrampla con toda esperanza; a partir de aquí se suceden y precipitan los motivos más apocalípticos y fúnebres: A las fanfarrias dislocadas de las trompetas se mezclan las cuerdas dolorosas y el ritmo de las arpas. La terrible sordina de los metales y las cuerdas entonan lúgubres presentimientos.

Desde esa lúgubre procesión expresionista que se sucede e impone, aún le quedan tímidas fuerzas para una nueva reaparición al tema de la Esperanza, que se levanta anhelante, en la viola a la que siguen los violines. Discurre con las fuerzas mermadas, deformado y reaparecen gloriosos y consoladores los motivos de las  llamadas heroicas

Se está acercando el pasaje más terrorífico y de máxima violencia al que aludía Alban Berg: Sonará por última vez el motivo crítico y se precipita la definitiva catástrofe: todo es inútil, con “rabia y furor”, indica Mahler en la partitura en 19:33 resonarán, rotundos y definitivos los golpes de timbal y los metales … es la clara evocación de la muerte … se oirán en la distancia las campanas de la Sexta sinfonía. Todo el final del desarrollo evoca la desolación y la muerte.

Reexposición en 21:24nuevamente con el tema de la esperanzaEsta vez, de forma magistral el compositor lo presenta en un trasfondo de desolación y evidente marcha fúnebre. El tema discurre como envuelto en su propia mortaja.
Después de ese cortejo funerario, el movimiento parece que hubiera terminado si no fuera por los ecos de la música que siguen resonando como restos de un colosal naufragio… Sólo remanentes de los temas… La lucha ha terminado.

En un ambiente de vacío, se iniciará una libre cadencia contrapuntística, prácticamente una improvisación barroca en la que flautas, trompas, cellos y contrabajos, divagan de forma atemática en el mismo espacio temporal. Un último forte conduce a la cita final de la llamada de las trompetas. 

El arpa inicia la coda en 25:55, sobre una variante en re mayor del tema de la Esperanza a modo de recuerdo. Una trompa y posteriormente una flauta susurran en la lejanía. 
El solo de violín y luego el oboe, evocan agónicamente el tema principal. El arpa, las cuerdas y los vientos silabean un re en pianissimo; el piccolo y el violoncello lo sostienen por un momento… 

...Por fin el silencio...


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